La soya: una buena alternativa vegetariana

La soya, una buena alternativa vegetariana

La soya, además de contener proteínas de alto valor biológico, fibra y ácidos grasos esenciales, cuenta con un delicioso sabor que combina con todos los alimentos. Es por ello que, cuando se trata de cocina vegana, se recomienda el uso del aceite de soya para la preparación de alimentos, pues conserva las propiedades de la soya y, además, permite preparar deliciosos platillos.

¿Cómo consumir la soya?

Si decidís llevar una alimentación vegetariana, es importante que te asesores con un nutriólogo, de manera que puedas cumplir con el aporte de todos los nutrimentos indispensables para tu organismo, incluidas las proteínas, adecuado a tu estilo de vida, edad y peso.

Es recomendable que incluyas en tu dieta leguminosas como frijol, lentejas y todos aquellos productos derivados de la soya en tu alimentación. Es necesario combinarlos con cereales, como el arroz, la pasta y el pan. Esto se debe a que, al combinarlos, se convierten en una proteína de alto valor nutrimental.

La soya es una de las leguminosas más versátiles, ya que es posible comprarla o elaborarla de diferentes maneras:

Aceite de soya. El Aceite de Soya, también conocida como “soja”, es uno de los aceites vegetales que cuenta con una mayor versatilidad. Esto se debe a que su sabor es neutro. Al extrae el aceite, es sometido a un proceso de refinamiento, el cual da como resultado un aceite de color amarillo claro y su sabor suave. Este aceite es ideal para cocinar, ya que conserva las propiedades de la soya y las añade a tus platillos.

Bebidas de soya. Podés ir al supermercado y encontrar muchas bebidas de soya, tanto evaporada como fresca, pero, si sos partidario de los productos naturales, podés preparar tu propia bebida de soya en casa. Además, este tipo de bebidas son una excelente opción para aquellas personas que son intolerantes a la lactosa.

Yogurt de soya. Es posible encontrar yogurt de diferentes sabores, como fresa o mango. Aunque muchas personas creen que su sabor es distinto, la realidad es que es difícil notar la diferencia entre los que tienen soya y los que son lácteos.

Tofu. Se le llama así al queso de soya y puede comerse de distintas maneras; desde un sándwich hasta un guiso complejo y postres de tofu. Es uno de los derivados de la soya que, una vez que lo pruebes, lo amarás para siempre.

Carne de soya. La denominada “carne de soya” no contiene colesterol ni grasa saturada. Es posible encontrarla saborizadas de pollo o res y es un elemento de la cocina vegana y vegetariana que te permitirá variar tu menú a diario, ya sea en trozos, en milanesas o a modo de carne para hamburguesas.

Cuidar de tu salud y la de tu familia es importante, y llevar una dieta vegetariana, elaborada por un nutriólogo, es una excelente herramienta para ello. Y, aunque decidas seguir con tu dieta convencional, incluir los productos derivados de la soya siempre es una excelente opción, debido a su variedad y delicioso sabor.

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